La verdad
Comer en exceso ocultaba la verdad. Alimentábamos nuestras ilusiones con comida que dañaba nuestro cuerpo. Las ilusiones se hacían más fuertes y más grandes hasta que nuestras mentes quedaban nubladas de ilusiones en vez de estar iluminadas con la verdad.
Renunciar a nuestras ilusiones es doloroso y da miedo, pero a largo plazo resulta menos difícil que tratar de vivir con ellas y para ellas. Es imposible deshacernos de nuestras ilusiones nosotros solos. El Poder Superior nos va guiando a la verdad por medio de los Doce Pasos y del programa de CCA. Es necesaria la abstinencia de la compulsión de comer para poder dejas de alimentar nuestras ilusiones y dejarle paso a la verdad.
Conocer la verdad nos hace libres. Ya no tenemos que aferrarnos a viejas dependencias y hábitos autodestructores. Nuestro Poder Superior nos da tanta verdad como estemos dispuestos a aceptar y a trabajar por ella. Esto no nos hace sentir agobiados, sino que gradualmente vamos siendo capaces de asimilar la realidad de nuestra situación. Al aceptar la realidad y frenarnos de usar la comida como escape, somos capaces de vivir con la verdad en vez de con ilusiones.
Guíame por el poder de la verdad.
COMENTARIO 2015
Siempre he vivido de ilusiones, de hecho ahora todavia sigo haciendolo, pienso que voy a llegar a estar delgada algun dia, pero no me privo de ese cafetin tan calentin que tanto me gusta a corto plazo, asi que esas ilusiones nunca se terminan cumpliendo y llega lo que no me gusta nada, la frustracion