Veinticuatro horas al día
Practicamos los principios CCA veinticuatro horas al día en todos nuestros asuntos. Nuestro programa no es una dieta, sino un estilo de vida. Cuando comíamos compulsivamente, la comida ocupaba todos los días el papel central en nuestras vidas. La abstinencia remplaza a la comida como nuestra principal preocupación, y mantener la abstinencia significa trabajar el programa.
Cuando hacemos esto, nos sorprende lo bien que transcurre el día. Nuestro trabajo es más fácil y productivo. Gastamos menos tiempo y energía riñendo con nosotros mismos y con los demás. Y lo mejor de todo, no tenemos que estar siempre en lo correcto. Ser capaces de cometer errores nos libera del egocentrismo.
Ser honestos con nosotros mismos nos permitirá ser honestos con los demás, quienes a su vez responderán en forma más positiva. Nos preocupa menos caerle bien a todo el mundo y nos interesa más nuestro crecimiento dentro del programa. Cuando anteponemos los principios a las personalidades, nos enredamos menos en relaciones confusas, donde cada quien asume determinado papel.
Que Tú estés en mi mente antes que todo, veinticuatro horas al día.
comentario 2015
no, esto no lo hago por ser tu. Este amiguismo tan tipico en la sociedad, donde cada vez menos pero todavia sigue existiendo el enchufismo, rompe el que se antepongan los principios ( valores) a las personalidades. Lo que es justo, sera siempre justo
#sinestigma