Estar disponibles
En nuestra búsqueda de seguridad, recurrimos a la comida en tiempos de dificultad. Ahora está aumentando nuestra confianza en nuestro Poder Superior en vez de en la comida. Sin embargo, no “usamos” al Poder Superior del modo como solíamos tratar de usar la comida. No usamos a Dios; Él nos usa a nosotros.
Lo que hacemos es ponernos a disposición del Poder Superior y abrirnos a Su Luz y Su guía. Cada día rezamos porque podamos hacer Su voluntad, no la nuestra. A menudo esto significa tener un horario más flexible que el que teníamos en el pasado. Como el Poder Superior siempre es creativo y nuevo, no podemos adherirnos a nuestros antiguos hábitos y rutinas. Insistir en nuestro tiempo, en nuestro modo, en nuestro plan, es bloquear la guía de Dios.
A veces se nos llamará a dar un servicio que signifique sacrificar nuestros planes del día. Cuando el apremio provenga de nuestro interior, seguirlo estimulará nuestro crecimiento dentro del programa.
Hoy estaré a Tu disposición para que me uses.