Pide instrucciones
Cuando no sepamos hacia dónde voltear, no seamos tan orgullosos para no preguntar. Hemos descubierto un programa que nos puede guiar sacándonos de la confusión, de la compulsión de comer y llevarnos a una vida ordenada y satisfactoria. En CCA hay gente que nos puede dar las instrucciones que necesitamos si les pedimos ayuda.
Hay muchas cosas que podemos hacer solos: estudiar a fondo la literatura del grupo, planear nuestras tres comidas diarias, establecer un firme contacto con nuestro Poder Superior. Sin embargo, cuando nos encontramos con un obstáculo inesperado, o cuando no estamos seguros de cómo manejar una situación difícil, necesitamos buscar pronto la ayuda que brinda nuestro grupo. Para poder recibir ayuda, por lo general tenemos que pedirla.
La ilusión de que sabíamos cómo manejar nuestra vida y de que no teníamos que seguir las instrucciones de nadie fue una de las causas de nuestras dificultades con la comida y con la vida en general. Admitir que por nosotros mismos somos impotentes nos hace capaces de pedir las instrucciones que necesitamos.
Señor, te pido Tu dirección.
comentario 2014
Esta lectura yo creo que la hicieron para mi. yo suelo ser (mal) orgullosa y no ser humilde para preguntar instrucciones aunque ello me lleve a la no accion. Tengo una mal concepto de lo que es el orgullo o amor propio. Amor propio no es eso, porque asi lo unico que consigo es tirar piedras contra mi propio tejado. Tengo gracias a Dios un programa que me puede guiar, pero tengo que dejarme guiar. Deseo tener una vida ordenada y satisfactoria. Para poder recibir ayuda, tenemos que saber pedir ayuda, y eso me cuesta horrores, es el dichoso orgullo. Admitir que por nosotros mismos no podemos es duro para mi dañado orgullo.

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