Altibajos
Abstenernos de la compulsión de comer no nos garantiza que todo irá sobre ruedas en el plano emocional. Seguimos teniendo altas y bajas, y a menudo sentimos el dolor emocional más agudo cuando ya no usamos la comida como narcótico.
Parte de nuestro programa implica luchar por lograr un equilibrio y tener la justa perspectiva de las cosas. La experiencia nos enseña a no dejarnos llevar ni por el júbilo extremo ni por la depresión. Éstos son estados de ánimo que no duran, por lo que preferimos basar nuestras acciones en las decisiones racionales que hacemos durante los periodos de callada reflexión.
El contacto con amigos de CCA durante los periodos en que tenemos altibajos nos ayuda a poner en perspectiva nuestras emociones. Al expresar lo que sentimos, estamos mejor capacitados para manejarlos. Algunos tendemos a hacer llamadas telefónicas cuando estamos muy contentos; otros la buscan cuando se sienten tristes o preocupados. Lo ideal es hacerlas en ambos casos para que podamos darnos fuerzas unos a otros y aprender a que los cambios de estado de ánimo no nos agobien.
Que recuerde que Tú puedes controlar mis altibajos