En caso de duda, abstente
Si determinado alimento no está incluido en nuestro plan, sabemos que no debemos comerlo. Si tenemos duda, también lo hacemos a un lado. Si en nuestra mente nos preguntamos si nos convendrá o no comer cierto alimento, lo más probable es que estaremos mejor sin él. Ya sea que estemos bajando de peso o manteniendo la baja, habrá determinada comida que hayamos decido evitar, ya que la experiencia nos ha demostrado que no somos capaces de manejarla con moderación.
El principio: «En caso de duda, abstente» se puede extender a otras áreas de nuestra vida. Si no estamos seguros acerca de un particular curso de acción, lomejor es no apresurarnos a tomarlo. A medida que aprendemos a escuchar la vozinterior, mejor respondemos a la guía de nuestro Poder Superior. El conocimientode lo que es. Su voluntad se vuelve más sólido y desarrollamos una base firmepara tomar decisiones.
Cuando estamos dispuestos a esperar la dirección de Dios, ésta llega. Podemosentregarle a Él nuestra indecisión para que nos la aclare.
Señor, danos prudencia para seguir Tu dirección