La vida es oportunidad
Cada mañana, al despertarnos, le damos gracias a nuestro Poder Superior por otro días más de abstinencia. Cada hora que se nos da es una oportunidad para crecer interiormente y para aprender y servir. Podemos creer que Dios tiene un plan para cada día que nos da y que Él lo revelará paso a paso mientras estemos atentos para escuchar Su guía.
Si estamos empeñados en llevar a cabo nuestras propias ideas y proyectos, podemos no oír la guía que viene de Dios. Necesitamos permanecer abiertos y flexibles para que Él pueda usarnos como quiera.
Considerar el tiempo y las tareas que tenemos como oportunidades para servir nos salva de la ansiedad y preocupación centradas en uno mismo. No tenemos que ser compulsivos acerca de nuestro trabajo y actividades. Dios sabe cuál es nuestra capacidad y no nos dará más de lo que podamos manejar. Él está siempre listo para dirigir nuestros esfuerzos cuando recurrimos a Él.
Gracias por la oportunidad de vivir y de servir hoy.