Creencias acerca del dinero
Estaba empezando en un empleo nuevo dentro de una corporación. Yo era eficiente en mi actividad. El gerente de personal y yo estábamos hablando de los detalles de la contratación y él me preguntó cuánto creía que merecía ganar. Lo pensé y le dije que 400 dólares al mes. Esto era en los años sesenta. No quería pedir demasiado, de modo que decidí pedir la mínima cantidad con la que pudiera vivir. Me contrató y me dio lo que le había pedido. Tiempo después, cuando dejé ese trabajo, el gerente de personal me dijo que había estado dispuesto a pagarme lo que yo hubiera querido. Si le hubiera pedido 600 o hasta 700 dólares mensuales, que era un sueldo magnifico en esa época, me los hubiera dado. Me había limitado a mi mismo por lo que creía que merecía. (Anónimo).
¿Cuales son nuestras creencias acerca del dinero?¿Creemos que el dinero es malo o que esta mal tenerlo?
Ninguna de las dos cosas. Es un articulo en la tierra, una necesidad. Es lo que la gente necesita para pagar muchas de sus necesidades básicas, así como lujos y gustos; es una de las maneras como se les recompensa por su trabajo. Sin embargo, amar el dinero puede ser tan contraproducente como amar a cualquier otro articulo. Nos podemos obsesionar con el dinero; lo podemos usar como un escape de las relaciones y de los sentimientos; lo podemos usar en forma compulsiva para ganar una sensación temporal de poder.
El dinero es simplemente dinero.
¿Creemos que hay escasez de dinero?
Muchos de nosotros crecimos con un pensamiento de privación en lo concerniente al dinero: no hay suficiente. Nunca habrá suficiente. Si obtenemos un poco, podemos guardarlo y atesorarlo porque ya no hay más.
El dinero no está escaso. No tenemos por qué desperdiciar nuestra energía guardando resentimiento hacia aquellos que tienen suficiente. Hay mucho dinero aquí en la Tierra.
¿Cuánto creemos merecer?
Muchos de nosotros nos estamos limitando a nosotros mismos por lo que creemos merecer.
El dinero no es malo. No hay escasez, excepto en nuestra mente y en nuestras actitudes. Y lo que creamos merecer, eso será lo que recibamos.
Podemos cambiar nuestras creencias por medio de afirmaciones, fijando metas, empezando por donde estamos y trabajando para llegar lentamente a donde queremos estar.
“Hoy examinaré mis creencias acerca del dinero. Empezaré el proceso de dejar ir cualquier creencia autoderrotista que pueda estar limitando u obstaculizando la parte económica de mi vida”.