PASANDO LAS NAVIDADES
Para algunos, las escenas, los signos y los olores de las navidades les traen un sentimiento de alegría y calidez. Pero mientras otros se sumergen alegremente en la época navideña, algunos de nosotros nos hundimos en el conflicto, en la culpa y en un sentimiento de perdida.
Leemos artículos acerca de como disfrutar las vacaciones, leemos acerca de la depresión de Navidad, pero muchos de nosotros aun no podemos figurarnos como atravesar la temporada navideña. No sabemos como es y como se siente tener una Navidad alegre.
Muchos de nosotros estamos divididos entre lo que queremos hacer en las vacaciones navideñas y lo que sentimos que tenemos que hacer. Podemos sentirnos culpables porque no queremos estar con nuestras familias. Podemos experimentar una sensación de perdida porque no tenemos el tipo de familia con la que querríamos estar. Muchos de nosotros, años tras años, entramos al mismo comedor en el mismo día festivo esperando que este año sea diferente. Luego nos marchamos, año tras año, sintiendo que nos han fallado, sintiéndonos decepcionados y confundidos por todo ello.
Muchos de nosotros tenemos viejos recuerdos dolorosos que los días festivos disparan. Muchos de nosotros sentimos un gran alivio cuando terminan los días festivos.
Uno de los más grandes regalos de la recuperación es aprender que no estamos solos. Probablemente hay tantos de nosotros que se sienten en conflicto durante los días festivos como tantos que se sienten en paz. Estamos aprendiendo, por medio de ensayo y error, a cuidar un poco mejor de nosotros cada época navideña.
Nuestra primera tarea de recuperación durante las festividades navideñas, es aceptarnos a nosotros mismos, nuestra situación y nuestros sentimientos acerca de la situación. Aceptamos nuestro sentimiento de culpa, nuestra ira y nuestra sensación de pérdida. Todo está bien.
No hay una manera perfecta o correcta de manejar las festividades. Podemos encontrar nuestra fortaleza haciendo las cosas lo mejor que podamos, un año a la vez.
“Esta temporada navideña, me daré permiso para cuidarme a mí mismo”.