Saltar al contenido

REFLEXIONES DIARIAS AA 4 NOVIEMBRE

    UNA DISCIPLINA DIARIA

    … pero cuando (el examen de conciencia, la meditación y la oración) se entrelazan y se interrelacionan de una manera lógica, el resultado es una base firme para toda la vida.

    — DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 96

    Los últimos tres Pasos del programa invocan la amante disciplina de Dios sobre mi obstinada naturaleza. Si todas las noches yo dedico unos momentos a revisar los puntos sobresalientes de mi día, reconociendo a la vez aquellos aspectos que no me gustaron tanto, obtengo una historia personal de mí mismo, historia que es esencial para el viaje hacia mi autodescubrimiento. Podía ver mi desarrollo, o la falta del mismo, y pedir en oración meditativa ser aliviado de aquellos defectos continuos que me causan dolor.

    La meditación y la oración también me enseñan el arte de centrarme y escuchar. Veo que el alboroto del día se va apagando cuando rezo por Su voluntad y orientación. La práctica de pedirle a Él que me ayude en mis esfuerzos por la perfección, le da una nueva perspectiva al tedio de cada día, porque sé que hay honor en cualquier trabajo bien hecho.

    La disciplina diaria de oración y meditación me mantendrá en buena condición espiritual para enfrentarme a lo que venga — sin pensar en un trago.


    El acto de orar y meditar es una de las maneras más poderosas de combatir las adicciones. Es una forma de disciplina diaria que nos conecta con nuestra fuente de poder interno y nos ayuda a mantenernos centrados y enfocados en nuestras metas y objetivos. La oración y la meditación nos ayudan a calmar nuestra mente y a reducir el estrés, lo cual es esencial para evitar que las adicciones se apoderen de nosotros.

    La oración y la meditación nos ayudan a darnos cuenta de lo que realmente importa en la vida y nos motivan a seguir adelante cuando las cosas se ponen difíciles. Nos ayudan a darnos cuenta de que somos mucho más que nuestras adicciones y que tenemos un propósito y un destino mucho más grandes. Cuando nos enfocamos en nuestra fuente de poder interno, nos damos cuenta de que podemos superar cualquier obstáculo y que somos capaces de alcanzar cualquier meta porque estaremos alineados con la voluntad de el Poder Superior.

    La oración y la meditación nos ayudan a darnos cuenta de que somos amados y que somos merecedores de todo lo bueno de la vida. Nos ayudan a darnos cuenta de que no estamos solos en esta lucha y que siempre podemos contar con la ayuda de nuestro Poder Supremo, como cada quien lo conciba. La oración y la meditación nos ayudan a darnos cuenta de que la vida es un regalo y que debemos apreciarla y cuidarla.

    error: Content is protected !!