Estar preparados
Necesitamos estar preparados para las ocasiones en que tendremos la tentación de comer lo que no debemos. Esto puede significar comer antes de asistir a una reunión donde quizÔ no sirvan la comida adecuada o ajustar nuestro horario de comidas para que podamos esperarnos hasta que estemos de regreso.
En el pasado, quizĆ” ponĆamos como pretexto no querer herir los sentimientos de otra persona para racionalizar una desviación de nuestro plan de alimentación. NingĆŗn anfitrión espera que su invitado ingiera un alimento al cual es alĆ©rgico. Nosotros somos los Ćŗnicos responsables de lo que entra en nuestra boca. Si nos encontramos con comida que active nuestra enfermedad, lo mejor serĆ” quedarnos con hambre que comer lo que nos enferma.
Cuando estamos dispuestos a todo con tal de guardar la abstinencia, podemos encontrar una manera de manejar las situaciones peligrosas con la comida. āNo, graciasā es una herramienta muy Ćŗtil.
Que esté preparado para las ocasiones de tentación.